
Garzón presentó la propuesta de liquidación de IU en la ejecutiva del día de ayer («Colegiada se llama ahora») como «única solución» para el futuro de IU y con el apoyo entusiasta del Secretario General del PCE, Enrique Santiago.
¿Cuál es la clave de esta jugada? Pues que el PCE, tras su último Congreso, tiene como objetivo dejar de ser una parte de IU que, a su vez, es una parte de Unidas Podemos y quiere interlocutar directamente con la pluralidad orgánica de UP (al mismo nivel que ahora lo hace IU)
En una primera etapa se llevó a cabo la conversión de IU en una plataforma de activistas centrados en el «conflicto social» y, efectivamente, ya se ha producido una merma sustancial de la organicidad de IU: en los órganos de dirección lo normal es que asistan menos de la mitad de sus miembros y hace tiempo que se ha asumido que la línea política real sea la que se hable por Garzón y algunos más en el sanedrín de la pluralidad de Unidos Podemos
Ahora, acabado el ciclo electoral, ya no hay motivo para retrasar una tarea que, además, se ha hecho más factible por la debilidad y progresiva desmembración de Podemos.
No voy a entrar en los otros trasfondos políticos que hay tras esta operación porque todo esto lo expliqué en un artículo anterior el pasado mes de enero en el que ya analizaba todo lo que está sucediendo. Si tenéis interés podéis leerlo aquí